Culpa y Realidad

3: Parte Uno: ¡Por Mi Gran CULPA, Sísifo!

55/66,55


Las Puertitas del Señor L_ópez

Si a la duda, la veo como la primera puerta al desdoblamiento, y a la “momentánea” separación de la esencia; y si al miedo, lo veo como la segunda puertita de esa separación; la culpa, pues, bien podría ser la tercera “puertita del Señor L_ópez”, (el que navega por L -UB12-), haciéndonos sentir penados (77 -como trauma y conciencia-), o culpables, si queremos trasvasar la BARRERA que nos separa de AQUELLA.
Si entramos allí, en esa separación, dentro de ella, nos podemos ver en el destino de Sísifo (80/96,80), condenado a levantar su carga, una y otra vez, y subir el mismo acantilado, una y otra vez, llegar a lo alto de la colina, y tener que hacer todo el recorrido, una y otra vez.
Este Mito, Ahora Nos Va A Servir, Para Ver La Programación Base Del Destino Humano.
La cuestión es que aquellas tres obstrucciones, -la duda, el miedo y la culpa-, cumplen un rol muy importante en el grupo protagónico de las dis_torsiones.
La mente, con sus básicos recursos de comunicación, no deja entrar la Conciencia creativa del 5.
Entonces, en 55 (la totalidad de la lógica), vemos que REALIDAD (55), se va a ver interpuesta con las “pequeñas” realidades, las que puede ver la mente.
Seguimos explorando el perímetro de la interferencia. Realidades que, a su vez, también usan pequeñas, pero efectivas artimañas. (Es decir, en plano 1 son efectivas).
Por tanto, tampoco las descartemos, pero estemos atentos a lo que hay encerrado en ellas; por ejemplo, en esta culpa, pues, sostiene la Lógica del pasado, y por ende, retiene la perspectiva de futuro.

Entonces, veamos estas tres distorsiones, como tres de los más preparados soldados de tres, es decir, del plano mental. Tres soldados para alejarnos de la esencia. ¡Los tres chiflados!




Aunque en la foto, en realidad, vemos que eran seis. Curiosamente, el tercero cambiaba, y fue interpretado por cuatro actores.
Por tanto, en este ejemplo al azar, vemos que el tercer chiflado, tiene muchas caras… Pasa lo mismo, con esta tercera distorsión, la culpa tiene muchas caras.
Sigamos con las tres interferencias, que particularmente veo como los “Tres Grandes Sellos”, que nos alejan del enlace con el Emisor Original.
Según mi punto de vista, CREO que son  tres de las principales interferencias, y hacen mucho ruido, como para tener una conexión diáfana y 0xigenada, la que nos disponemos a que se reestablezca, como estamos viendo en este cierre de la apertura del cono de tiempo.
La conexión con EL, se encuentra con ruido, y éste es la contraparte al silencio, al 88, a esta doble torsión.
Pero donde se cortó, ahora se puede unir, y podemos volver a que funcione este teléfono dimensional. Es decir, podemos intercomunicarnos in_terna_mente.
Y en realidad, como vemos, el teléfono es muy sencillo…
 

Hay un proceso natural, que YO (antena) entiendo que hace aquella Inteligencia Subyacente, tan simple, como este juego infantil…

Volviendo a la culpa, es algo que sentimos, y es inculcado desde muy chiquitos. Por tanto, en este tema, hay mucha identificación.
No obstante, la piedra se puede volver camino, digamos.
Volvamos a algo más concreto, a 55, y precisamente al segundo 55; y a que ese placer sutil, es el que da más placer, paradójicamente. Pero además, observo que este segundo 55 “puede” con el primero, digamos, como si esto fuera un partido de futbol. Total, hay un 55 en una velocidad baja, y otro en una velocidad sutil. Por tanto, podemos hacer el esfuerzo, por desembarazarnos de la culpa, desde la velocidad más lenta, o podemos abrirnos a la veloz.

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